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Cinco oficiales de la Guardia Nacional de Estados Unidos fueron acusados de haber utilizado Bitcoin como herramienta para llevar a cabo varios crímenes de robo de identidad, que fueron realizados entre julio del 2014 y mayo del 2015.
Los crímenes cometidos por estos oficiales consistieron en haber utilizado Bitcoin para comprar códigos de tarjetas de crédito de personas o negocios con cuentas de la Federal Credit Union y luego recodificar tarjetas de su pertenencia con los códigos robados. Esto con la finalidad de comprar varios tipos de mercancía, como tarjetas de regalo, objetos de valor y artículos electrónicos en el Servicio de Intercambio de la Fuerza Aérea del Ejército (AAFES) y otras tiendas de bases militares.
Tres de los guardias involucrados en estas actividades fueron acusados recientemente dentro de un mismo caso: Derrick Shelton, de 28 años de edad; James Stewart, de 25 años; y Quentin Stewart, de 28 años. Cabe destacar que James y Quentin Stewart eran importantes integrantes de la Guardia Nacional adjudicados al Distrito de Columbia. El primero se desempeñaba como especialista en el ejército y el segundo como sargento primero.
Vincent Grant, otro especialista del Distrito de Columbia, fue arrestado tras haber sido acusado en un caso distinto al de Shelton, J. Stewart y Q. Stewart por haber cometido un delito similar. Tanto en el caso de Grant como el de J. Stewart fue comprobado que se encontraba involucrado otro funcionario llamado Jamal Moody. Este último fue declarado culpable tras admitir haber adquirido artefactos de codificación de bandas magnéticas de tarjetas bancarias que utilizó para recodificar tarjetas de débito y crédito a su nombre con más de 100 códigos que adquirió ilegalmente utilizando Bitcoin.
Hasta los momentos, Shelton, J. Stewart, Q. Stewart y Grant aún se encuentran esperando por su sentencia. De acuerdo con las declaraciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos, los tres primeros podrían ser condenados a un máximo de 20 años de prisión y un mínimo de 2 años. Por otra parte, Grant podría ser sentenciado a 7 años de prisión como máximo y 2 años como mínimo.
Estos casos están siendo investigados por el Grupo de Trabajo de Robo de Identidad de Maryland en cooperación con el presidente del Cuerpo Especial de Fraude Financiero. Con estos esfuerzos ambos equipos de trabajo esperan demostrar su compromiso y su amplia experiencia en la investigación de este tipo de casos, con la finalidad de combatir el fraude financiero y garantizar la protección de los datos y la identidad de los usuarios.