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Israel ha calificado a las monedas digitales como activos o bienes desde que comenzaron a definir su marco legal. Recientemente, el organismo encargado de establecer las medidas tributarias en Israel publicó una nueva circular remarcando que las “monedas virtuales” son consideradas como un activo o propiedad, hecho que aclara que las actividades vinculadas a estos instrumentos están sujetas a impuesto sobre la renta e impuesto al valor agregado.
La Autoridad Tributaria de Israel (ISA) expresó en su comunicado que la actividad profesional vinculada a “métodos de pago descentralizados”, es decir, la relativa a bitcoin y a las altcoins, mantiene las obligaciones tributarias impuestas por el organismo en cuestión a los bienes.
De acuerdo con las directrices del ISA, los ciudadanos que realicen actividades comerciales con criptoactivos actuando como una empresa, estarán en la obligación de pagar Impuesto a las Ganancias de Capital, obligación tributaria común para la venta de commodities (productos).
Asimismo, los participantes del mercado de las criptomonedas que no alcancen el rango comercial de empresa, solo deberán pagar el Impuesto sobre la Renta (ISLR), como cualquier actividad comercial.
Por otro lado, realizar transacciones con criptoactivos acarreará el pago de Impuesto del Valor Agregado (IVA), pero tener bitcoin no. El ISA ha definido a las monedas digitales como activos intangibles cuya “actividad en el campo es solo para fines de inversión”. Por ello, no califican a los “medios de pago distribuidos” como un negocio en sí mismo, y por ende, el tener bitcoins, ethers o cualquier otro activo digital, no convierte al ciudadano en contribuyente al IVA.
Sin embargo, existen dos escenarios donde los criptoactivos generan la obligación del IVA: si la compañía es clasificada como institución financiera y si se realizan actividades de minería. Serán clasificados como institución financiera aquellas empresas que se dediquen a la compra y venta de criptoactivos; mientras que los mineros recibirán la clasificación de distribuidor a efectos del impuesto.
Es importante tener en cuenta que esta circular forma parte de una regulación planificada que comenzó a desarrollarse el septiembre pasado. Su objetivo es el de crear un marco regulatorio que permita emitir políticas regulatorias equilibradas para los criptoactivos y la innovación tecnológica. Este proyecto legal comenzó impulsado por el interés inmediato de controlar las ICO (Oferta Inicial de Moneda).