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El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) del Grupo de los 20 (G-20) publicó este lunes 16 de julio un reporte sobre su labor y la de otras tres instituciones en el monitoreo del mercado de las criptomonedas. El documento esboza que han estado haciendo esfuerzos para construir un marco regulatorio internacional al respecto.
El reporte, titulado “Cripto-activos, Informe al G20 sobre el trabajo del FSB y los organismos de normalización”, establece que el foco del FSB durante los últimos meses ha sido crear un marco de trabajo para monitorear continuamente cuáles son los riesgos del mercado de las criptomonedas para la estabilidad financiera global, enfocándose en “métricas potenciales”. Una tarea para la que pretende trabajar en conjunto con el Comité Permanente de Evaluación de Vulnerabilidades (SCAV) y el Comité de Pagos y Estructura de Mercado (CPMI).
Dichas métricas, según el documento, están basadas en data pública que “podría ser útil para determinar riesgos a corto y mediano plazo” tomando en cuenta el “tamaño y la tasa de crecimiento de los mercados” para analizar los efectos que pudieran tener «los descensos en las valuaciones”; es decir, cuánto podría afectar las finanzas globales un desplome en los mercados de las criptomonedas y qué necesitan saber para prevenirlo.
De momento, el Consejo de Estabilidad Financiera aseguró que el mercado de las criptomonedas“no representa un riesgo material para la estabilidad financiera global”. Sin embargo, esto no significa que deban abandonar el “monitoreo vigilante” del ecosistema.
Asimismo, el reporte incluye los avances del trabajo que viene desarrollando la Organización Internacional de Comisiones de Valores (IOSCO, por sus siglas en inglés). Este organismo viene trabajando desde noviembre de 2017 en un marco de consultas sobre preocupaciones y experiencias con las Ofertas Iniciales de Moneda (ICO), que pueda servir como apoyo a los organismos reguladores que buscan determinar la naturaleza de una ICO dentro del marco legal vigente, y en consecuencia, los cambios potenciales que ofrecerían protección tanto a los inversionistas como al mercado.
Es importante tener en cuenta que la IOSCO destaca que las casas de cambio de criptomonedas no representan, “al igual que los criptoactivos en general”, un riesgo de estabilidad para las finanzas globales. Pero, según este organismo, sí plantean riesgos de protección al consumidor, integridad del mercado y financiamiento al terrorismo; razón por la cual, sin importar si las criptomonedas son consideradas como “acción, mercancía u otro producto financiero”, el intercambio de estos activos digitales debería cumplir con las leyes que apliquen.
Al igual que los criptoactivos en general, las plataformas de criptoaactivos no plantean riesgos de estabilidad financiera global. Sin embargo, plantean otras preocupaciones importantes, que incluyen la protección de consumidores e inversores, la integridad del mercado y el lavado de dinero / financiamiento del terrorismo, entre otros.
Del mismo modo, el CPMI se encuentra analizando las estructuras del mercado de las criptomonedas para detallar “las soluciones de pago que pueden ser impulsadas con la contabilidad distribuida”, como los pagos transfronterizos. Sin embargo, al igual que otras propuestas vinculadas al ecosistema de las criptomonedas, aún se encuentra en una etapa muy temprana ese estudio, por lo que aún se desconoce en qué pueda resultar.
Llama la atención esta postura del Consejo de Estabilidad Financiera, ya que se asemeja a la técnica regulatoria aplicada por otros países durante los últimos años, donde las autoridades han decidido optar por analizar detenidamente el modo en el que se mueve la criptoeconomía para que, llegado el momento, las medidas regulatorias sean puntuales y no invasivas. Es decir, que lleguen a proteger a los ciudadanos sin entorpecer el desenvolvimiento de la actividad económica vinculada a las monedas digitales.
Por otro lado, durante los últimos meses, el G-20 ha recibido otras propuestas regulatorias para el mercado de las criptomonedas, más específicamente vinculadas a la materia tributaria. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) envió en marzo de este año una propuesta para establecer una política tributaria para los criptoactivos, que tuvo lugar días después de la reunión del bloque de los 20 en Buenos Aires, Argentina; la cual concluyó sin decisiones sobre la regulación del criptomercado.
Imagen Destacada por SergeVo / stock.adobe.com