Tendencia alcista lleva el procesamiento de la minería de Bitcoin a nuevo récord

La minería en Bitcoin sigue en auge, hasta el punto de haber alcanzado un nuevo hito relacionado con la tasa de hash (hashrate) de la red, que llegó a nuevas alturas esta semana.

Distintos sitios web especializados en la recolección de datos sobre la red de Bitcoin coinciden en que la tasa de hash ha aumentado considerablemente los últimos días; aunque estos difieren en cuanto al máximo de exahashes por segundo alcanzados, y a la fecha exacta en la que se logró el ATH (All Time High).

CoinWarz es el portal que señala la cifra más alta, según el cual el hashrate de Bitcoin llegó a 72,6 EH/s el pasado jueves, 20 de junio. Tras hacer cumbre, la tasa de hash de dicha red descendió y se ubica actualmente en 52,8 EH/s.

Por otro lado, el sitio web Blockchain.com muestra que el ATH en el hashrate de Bitcoin es de 65,1 EH/s y que fue alcanzado el 18 del mes en curso. En cuanto a la información que muestra BitInfoCharts, el máximo histórico del hashrate de Bitcoin fue alcanzado el 15 de junio y no superó los 61,8 EH/s.

La relación entre el precio y la minería en Bitcoin

Históricamente, cada vez que el precio de Bitcoin ha experimentado alzas sostenidas, la actividad minera en esta red tiende a aumentar. El ejemplo más reciente es, precisamente, el que se aprecia en el ecosistema en la actualidad. El repunte que mostró BTC al ir de USD 3.826 a USD 9.768 en lo que va de 2019 también impulsó el crecimiento en la minería; lo que se ve reflejado en un aumento de 80% en la tasa de hash entre enero y junio de este año.

Los mineros, motivados por las posibilidades de obtener mayores ingresos ante la revalorización de la criptomoneda original, invierten en más y mejores equipos, así como en los eventuales gastos operacionales que implica poner en marcha más dispositivos dedicados a la minería de bitcoins. Esto incide directamente en el poder de minado o tasa de hash de la red; algo que, a su vez, incide en aspectos como la producción de bloques en la cadena y el reajuste de la dificultad de minado.

El fenómeno relacionado con el aumento del precio de BTC y la tasa de hash en su red también sucede a la inversa; es decir que, cuando el precio de esta criptomoneda baja, también suele bajar el interés de los mineros por operar en Bitcoin y, por consecuencia, disminuye su hashrate. Esto se vio a finales de 2018, un año en el que la larga y dramática caída de Bitcoin en el mercado obligó a muchos mineros a apagar sus equipos, ante la pérdida de la rentabilidad que sufrió la minería.