4 preguntas que debes hacerte antes de minar una criptomoneda

A lo largo del 2019 se ha visto un aumento en el interés por la minería de criptomonedas, aupado, principalmente, por el auge en los precios de estos activos en el mercado durante los últimos meses. Minar una criptomoneda implica invertir dinero en equipos que cuenten con la potencia necesaria. Según la magnitud del proyecto, los gastos serán mayores.

Hay algo en común entre quienes quieren minar una criptomoneda con hardware común, que ya tengan a la mano, y quienes están dispuestos a invertir en equipos especializados a pequeña o gran escala: ambos quieren obtener el mayor rendimiento posible de la minería. En este sentido, existe una serie de aspectos que deben ser evaluados antes de saber si vale la pena emplear todo el tiempo y los recursos que requiere ser un minero de criptomonedas.

Preguntas que debes hacerte para saber la rentabilidad de minar una criptomoneda

¿Cuánto cuesta adquirir el hardware que necesito?

Existe una variedad de equipos que pueden ser usados para la minería de criptomonedas. Entre ellos están los CPU (procesadores), las GPU (tarjetas gráficas) y los ASIC, que se especializan en un tipo de algoritmo de minado en específico.

La necesidad de un equipo más potente dependerá especialmente de la tasa de hash (hash rate) y de la dificultad de minado existente en la red de la criptomoneda que se pretenda minar. Bytecoin (BCN) y monero (XMR), cuyo algoritmo es Cryptonight, aún pueden ser minadas con CPU obteniendo cierto provecho de ello a largo plazo; mientras que criptomonedas como ether (ETH) y bitcoin gold (BTG), que usan los algoritmos Ethash y Equihash, respectivamente, dan mejores resultados si se minan con GPU. Bitcoin (BTC), por su parte, solo puede ser minada con equipos ASIC debido a la potencia que exige su red actualmente. Lo que hace que otras monedas que trabajen con el algoritmo SHA-256 de bitcoin, sean, preferiblemente, minadas con ASIC.

Tras conocer qué tipo de equipo se necesita para minar una criptomoneda determinada, también hay que considerar otros aspectos relevantes en este sentido. Uno de ellos es la disponibilidad del hardware. Si puede ser adquirido en una tienda de tecnología local o a través de un sitio web reconocido, e incluso si es necesario contactar al fabricante directamente. En caso tal, también hay que tomar en cuenta el costo del envío y el tiempo que podría tomar su despacho; puesto que mientras este tiempo pasa, la dificultad de minado y el precio de las criptomonedas, así como la rentabilidad de su minería, irá cambiando a favor o en contra.

Gracias al repunte que ha experimentado el mercado de criptoactivos a lo largo del 2019, el interés por la minería también ha crecido. Equipos usados de minería de bitcoins han subido de precio junto con su demanda. No obstante, las tarjetas gráficas y CPU se mantienen al precio en el que acostumbra verles en las tiendas. A diferencia del fenómeno ocurrido entre finales del 2017 y principios del 2018, cuando la escasez de tarjetas gráficas provocó que su precio de triplicara.

El precio del hardware per se no lo es todo, sino que también debe ser tomado en cuenta lo que tiene que ver con el acondicionamiento del espacio donde estaría el minero. En lugares con climas fríos, un protector de voltaje y algún ventilador que haga circular el aire puede ser suficiente para una pequeña granja minera, pero en lugares donde el clima es muy cálido, es importante contar con acondicionadores de aire o equipos que ayuden a mantener una temperatura óptima para la minería. Esto se debe a que el hardware, luego de tiempo minando, suele generar mucho calor y, de llegar a una temperatura muy alta, puede averiarse e incluso provocar un incendio si la situación no se controla a tiempo.

¿Qué tal son el costo y la calidad del servicio eléctrico y del Internet?

Dos elementos fundamentales para minar una criptomoneda son la energía eléctrica y el Internet. El precio de estos servicios y su calidad varia, según sea el lugar donde el minero se encuentre; por lo que resulta importante evaluar ambos en el contexto apropiado.

El consumo de ancho de banda de Internet no suele ser mucho en la minería si no se opera un nodo, es decir, si no se mina solo sino mediante un pool; pero sí es necesario que sea constante, para que no se detenga el proceso de minado y se pierda dinero en energía que no se aprovecha.

En cuanto al consumo eléctrico, mientras más se le exija al equipo, más alto será su consumo; esto, en lugares donde la electricidad es un servicio costoso, puede jugar en contra del minero, al punto en el que minar no sea rentable. En esos casos, es posible modificar parámetros del hardware para que consuma menos corriente eléctrica, pero ello implica una disminución en su poder de minado. De modo que hay que buscar un punto de equilibrio entre consumo eléctrico y rentabilidad.

En lugares donde la calidad del servicio eléctrico es precaria (fluctuaciones de voltaje o apagones constantes) la minería de criptomonedas es poco rentable, ya que esto no solo impide que los equipos se mantengan trabajando a buen ritmo, sino que también afecta la conexión a Internet. En el peor de los casos, las fluctuaciones de voltaje pueden terminar dañando el hardware y trayendo pérdidas al minero.

¿Cómo luce el mercado de criptomonedas?

Los movimientos del criptomercado son difíciles de predecir y sus fluctuaciones pueden ser mucho más dramáticas que las que se ven en las bolsas de valores u otros mercados similares. Por esta razón resulta bastante complicado predecir el precio que un criptoactivo tendrá a futuro. No obstante, hay técnicas que permiten analizar los posibles escenarios que atravesará el mercado de criptomonedas más adelante.

Factores como la experticia del equipo de desarrolladores y su compromiso con el proyecto, los planes de mejoras a nivel tecnológico presentes en su hoja de ruta y los casos de uso de la criptomoneda en cuestión, además de los ciclos del mercado, deben ser considerados para poder tener una idea de qué podría ocurrir con el precio de una criptomoneda eventualmente. Aunque, dada la alta volatilidad del criptomercado, no hay forma de garantizar que los escenarios previstos se cumplan al pie de la letra.

La importancia de tener presente el precio de la criptomoneda a minar y sus posibles fluctuaciones radica en que esto influye directamente en la rentabilidad. Las ganancias de la minería pueden ser mucho mayores a futuro de lo que eran al principio o viceversa.

El alza en el precio de un criptoactivo también puede ayudar a balancear las variaciones que ocurren en la minería; pues, mientras un proyecto gana más adeptos, son más los mineros que se van interesando en él. Esto puede hacer que se minen menos criptomonedas con el aumento de la dificultad de minado; pero, si el valor de dicha criptomoneda aumenta, minarla seguirá siendo rentable. Evidentemente, si el valor cae, el escenario será totalmente antagónico al recién descrito.

¿Cuántos más quieren minar la misma criptomoneda?

Como se explicó anteriormente, una criptomoneda con más mineros tendrá mayor hash rate, que, a su vez, generará un aumento en la dificultad de minado. Esto hará que a cada minero le cueste más hallar la solución a un bloque y, por consecuencia, obtener la recompensa por ello. En pocas palabras, a pesar de que la potencia del minero no disminuya, este recibirá menos criptomonedas mientras más suba la dificultad.

Los exploradores de bloques de cada blockchain pueden dar una perspectiva del flujo en el poder de minado de una red. Estas herramientas pueden ayudar a analizar dichas estadísticas y proyectar un estimado de qué tanto podría crecer la tasa de hash y la dificultad de minado de una criptomoneda. No obstante, estas cifras tampoco son fáciles de predecir, debido a que suelen ser influenciadas por el cambiante mercado de criptomonedas.

El aumento en el precio de un criptoactivo puede atraer nuevos mineros, del mismo modo en el que anima a mineros activos a invertir en más equipos y a fabricantes a crear hardware más potente. Todo esto influye en la rentabilidad de la minería a largo plazo. Por tal razón, también es importante evaluar este aspecto.

Herramientas y sitios web para medir la rentabilidad de la minería de criptomonedas

Existen sitios web y herramientas que pueden ayudarnos a evaluar la rentabilidad de la minería en determinado momento. Algunos de ellos permiten incluir una cantidad mayor de variables, con la finalidad de hacer una proyección lo más acertada posible en cuanto a las potenciales ganancias que se pudieran obtener. Tales variables pueden ser el algoritmo de minado la criptomoneda, el tipo y modelo de hardware a utilizar, el poder de cómputo del equipo, el costo de la electricidad y el precio de la criptomoneda.

Algunos de los sitios web más reconocidos en la comunidad minera son WhatToMine, Coin Warz y BTC.com, que dispone de una herramienta para medir la rentabilidad de la minería de bitcoins. En cuanto a WhatToMine y Coin Warz, suelen ofrecer una lista de opciones para minar de acuerdo con las variables descritas por el usuario; pero, igualmente, es importante hacer la tarea completa (investigar los demás factores que no toman en cuenta estos sitios web) y contrastar resultados antes de adentrarse a la minería. Esto puede librarnos de perder mucho tiempo y dinero.