Nueva tecnología de pagos del Banco Europeo será superior a las criptomonedas, afirma ejecutivo

Las autoridades regulatorias y las entidades bancarias del mundo han realizado tanto comentarios como movimientos estratégicos para, o bien adaptarse al surgimiento de la tecnología blockchain y las criptomonedas, ora prohibirlas o desprestigiarlas.

Ahora, unas nuevas declaraciones de un alto ejecutivo bancario parecen amenazar a blockchain con otra tecnología que según, será superior. Yves Mersch, integrante de la junta directiva del Banco Central Europeo, aseguró tener una herramienta con un mejor desempeño que blockchain.

Esta semana, el Banco Europeo realizó el Foro de Instituciones Financieras y Monetarias Oficiales en la ciudad de Londres, donde se disertó acerca la tecnología TARGET Instant Payment Settlement (TIPS) y sobre las criptomonedas. En el foro, estuvieron presentes diversas compañías de pagos y representantes de las entidades bancarias, quienes persiguen lanzar un sistema único para la realización de pagos instantáneos en toda Europa.

El sistema fue lanzado en noviembre de 2017, habiendo increpado a otras entidades bancarias a implementar la tecnología en cuestión para mejorar su eficacia, fungiendo como alternativa a blockchain. Se espera que este servicio sea implementado en el Eurosistema para noviembre de 2018.

Según Mersch, TIPS es capaz de procesar transacciones en 10 segundos con un costo de 0.2 centavos de euro. El ejecutivo prosiguió: “Las transacciones de la Tecnología de Contabilidad Distribuida (DLT) tienen un costo en su mejor momento de 30 euros y se toman al menos una hora. Hemos ordenado implementar sistemas de pago eficientes, e iremos tras ella. No nos debemos a una tecnología, nos debemos a los resultados”.

Mersch aseguró que las estipulaciones legales para aplicarse en blockchain están en etapas muy tempranas y de poco desarrollo, y que aún existen muchas preguntas en cuanto a este aspecto. Por tanto, buscan superar cuanto antes las incompatibilidades u obstáculos legales.

En el foro, Mersch aseguró que las criptomonedas no son dinero y que no representan a activos futuros. Además, afirmó que las bajas velocidades de confirmación, la inestabilidad del precio y el alto costo de las transacciones arruinaron el objeto de esta tecnología descentralizada.

“A esta velocidad, si usted comprase un montón de tulipanes con bitcoin quizá estos se marchiten para el momento en que la transacción se confirme”, aseguró haciendo quizá un guiño a la burbuja de tulipanes del siglo XVII, como lo afirmó hace unos meses el CEO de Credit Suisse AG, uno de los principales bancos europeos. Aunado a esto, comparó a las criptomonedas con esquemas de inversión de estructura piramidal, los denominados Ponzi.

Como los esquemas del señor Ponzi, estos inversionistas esperan altas ganancias futuras y creen que encontrarán a alguien para venderle cuando ocurra el colapso inevitable. Bajo estas condiciones, las criptomonedas presentan grandes fluctuaciones de valor, implicando que estas no pueden utilizarse como métodos de almacenamiento de valor.

Yves Mersch
Ejecutivo

Luego, dijo refiriéndose a blockchain que tan solo porque una tecnología sea nueva, significa que sea mejor. Sin embargo, aseguró que la las criptomonedas como fenómeno traerán una tecnología que puede ser útil y compartida mundialmente.

Sin embargo, en una entrevista realizada para Bloomberg en Frankfurt, Alemania, se refirió a las consecuencias “sociales y psicológicas” que las criptomonedas conllevan, además de adelantar que ya se están realizando esfuerzos conjuntos para lograr abarcar regulatoriamente a blockchain y los criptoactivos a nivel global.

La pregunta no es tanto que las criptomonedas ya están a un nivel que puede causar una disrupción enorme en la economía, sino que actualmente estamos más preocupados acerca de los efectos sociales y psicológicos que parecen traer. En este sentido, el dinero tiene que ver con la confianza y es por eso que los bancos centrales sienten que tienen un rol que cumplir para preservar la confianza del público en nuestro haber legislativo. Hay mucho dinero circulando y es como una fiebre del oro, pero sin oro.

Yves Mersch
Ejecutivo

Con anterioridad, el ejecutivo ya se había pronunciado acerca de su preocupación sobre los posibles efectos de bitcoin en las finanzas globales tras la adopción de la criptomoneda por mercados tradicionales, a la par que un estudio publicado por la misma institución señala que, para evitar este efecto, deben llegarse a acuerdos protocolares entre las diferentes plataformas tecnológicas para permitir la interoperabilidad entre las entidades financieras tradicionales y las basadas en blockchain.

A propósito de las declaraciones que la ejecutiva Benoit Coeuré hiciera acerca de una posible reunión del G-20 a celebrarse en marzo en Buenos Aires para atender este tema, aseguró que la misma no puede percibirse como un determinante absoluto de lo que pudiera suceder, sino que cuando llegue la oportunidad lanzarán diversas investigaciones al respecto e instarán a otras instituciones a seguir realizando estudios al respecto, para después comenzar a trabajar más de lleno en las regulaciones. Por los momentos, se preparan trabajando desde sus posiciones institucionales y particulares de cada país.

Durante el año pasado, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, aseguró que esta institución no estaba en potestad de regular los criptoactivos, mucho menos prohibirlos. Contrario a las regulaciones emitidas recientemente en países como Corea del Sur y China, la portavoz Daniele Nouy aseveró que la regulación de criptoactivos no es una prioridad. Además, según informaciones, Benoit Coeure, esta institución considera que aún no ha detectado riesgos de la irrupción financiera de las criptomonedas a un nivel macroeconómico.

Por una parte, la concreción de transacciones bancarias toma cerca de 24 horas; por otra parte, blockchain enfrenta algunos retrasos y comisiones exorbitantes en el procesamiento de las transacciones, pero reúne en sí otras facultades que la hacen además de transparente y descentralizada, escalable y autoregulable, dos de las facultades que quizá sean olvidadas debido a que el poco tiempo de existencia de estas plataformas no ha permitido que escalen oportunamente hasta alcanzar fases más avanzadas en su funcionamiento.

Además, el ecosistema blockchain es capaz de depurar de su espacio no solo aquellas plataformas que no triunfen en su aplicabilidad y desempeño criptofinanciero, sino aquellas que representan verdaderas amenazas para el usuario al tratarse de estafas y esquemas fraudulentos que en realidad, no son auténticas criptomonedas.